miércoles, 8 de junio de 2011

40 AÑOS DE HORTENSIA: CORDOBA HOMENAJEA A SU REVISTA ICONO EN EL V FESTIVAL PENSAR CON HUMOR





Hemos recibido una invitación para asistir a la Apertura de la Muestra sobre la Revista Hortensia en su 40º Aniversario, que se realizará en Córdoba (Argentina), mañana, jueves 9 de Junio, a las 19:00 horas en la Sala de Exposiciones del Paseo del Buen Pastor.

Es una estupenda ocasión para conocer más a fondo esta prestigiosa revista y a los autores que publicaron en ella, así que desde este blog, queremos animar a todos los amantes del Humor y la Historieta a que se pasen por allí y revivan los mejores momentos de la Revista Hortensia.
Para los que aun no conozcan esta emblemática publicación comentaremos un poco su historia y avatares:

HORTENSIA, fue editada en la ciudad de Córdoba, por D. Alberto Pío Augusto Cognigni (Bell Ville, Córdoba (Argentina) 1930 – 1983), a finales del año 1971, y creó escuela, con su “humor cordobés”.

Cognigni había estudiado en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad Nacional de Córdoba, trabajó en los Diarios Los Principios, La Voz del Interior, etc., fundó y dirigió el “Nuevo País”, publicó en las revistas Jerónimo, Gente, Así Es, y Campo Afuera, además de escribir un libro “Cognigni desde Córdoba”, y conseguir algunos premios como el SIP Mergenthaler, el ADEPA, etc. Firmaba como “El Irresponsable”, en Hortensia, un editorial lleno de carisma.

Hortensia estuvo diecinueve años viendo quincenalmente la luz, pasando de tiradas de 2000 ejemplares a más de 100.000, y estaba repleta de humor, a cargo de personajes caricaturescos como Negrazón y Chaveta, los típicos “guasos”, poco eruditos pero llenos de perspicacia y humor.

 Hortensia fue la única revista de humor del Interior que superó las murallas porteñas dando a conocer el popular humor cordobés. Quién no reconoce ahora, como propiamente cordobesas, las originales respuestas respuesta "no si vuá sé..." (no si voy a ser) a las preguntas obvias, como preguntarle a un florista "¿vende flores?" y el "nero" (negro, en la Córdoba argentina es un trato afectuoso y coloquial perdiendo la connotación "racial"; nero puede ser cualquier persona independientemente de su fisionomía) que reacciona con fastidio: "No, si vuá ser Miss Primavera!".

Una parte de su éxito arrollador fue el vacío que dejó en el mercado porteño la desaparición de publicaciones comoTía Vicenta pero también contribuyeron las grandes firmas que la revista cordobesa daba a conocer.

Autores de talla internacional, como los humoristas Caloi, Roberto Fontanarrosa (con Inodoro Pereira, y Boggie el aceitoso), Bróccoli, Lolo Amengual, Ian, Hermenegildo Sábat, Crist, Peiró o historietistas como Chamartín.

Hasta la publicidad que aparecía en la revista tenía tonos de humor y estaba preparada en colaboración con los anunciantes para que tuviera un toque risueño.

 El nombre Hortensia de la revista, tiene una procedencia curiosa: proviene de una conocida demente del barrio de Santa Ana (Córdoba) que vendía bulbos de hortensia y se levantaba la falda (pollera, en Córdoba) mientras soltaba palabrotas poco decorosas. Se dejaba ver por las cercanías del arrabal de la docta Córdoba, hoy conocido como el Paseo de las Artes y cuando pasaban las parejas se levantaba la falda y al no llevar ropa interior decía: «¡MIREN LA PAPA DE HORTENSIA!» (coloquialmente en el habla de  Córdoba “papa” es una forma de referirse a los genitales exteriores femeninos).

A principios de los ochenta, empezó el declive de la revista, en parte por la crisis económica y en parte porque los militares no la veían con buenos ojos, se sentían "amenazados" por la popularidad de Hortensia.

La prematura muerte de Cognigni de un ataque cardíaco el 16 de junio de 1983, un año después que su mujer, quien había sido otra columna fundamental de la publicación, fue el remate para el adiós definitivo de Hortensia. Años más tarde su hija María Laura Cognini llevó la revista a una obra teatral,en el teatro de Giordano de la ciudad de Carlos Paz.

En fin, toda una leyenda de la historia impresa.

Vayan a ver la Muestra y descubran el humor de sus páginas ahora destacado en grandes marcos, que lo catapultan definitivamente para la grandeza de la posteridad.

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